Hoy, nos centraremos en explicarte cómo evitar posibles fraudes a la hora de comprar un jamón ibérico. Especialmente, ahora que se acercan estas fechas, las Navidades, donde aparecen ofertas y gangas increíbles. Ya sabes que nuestro trabajo es ofrecerte productos de máxima calidad a un precio justo, pero debes saber, que hay productores e incluso grandes superficies que no son tan honestos.

De hecho, no hace mucho, a principios del 2018, la Guardia Civil inició una investigación al mayor vendedor de jamón ibérico de España, Comapa, por un presunto fraude alimentario y por irregularidades en el etiquetado del producto. La empresa en la que se distribuían los jamones de Comapa era Carrefour, y sus jamones fueron investigados por no tener certificación homologada. En el establecimiento se vendieron jamones de bellota sin certificar, por un valor de 195 euros, piezas que, de ser reales, tendrían un valor de 300 euros en el mercado. 

A la falta de certificación, se sumaba la sospecha sobre la pureza del origen genealógico de los cerdos empleados para esa producción.

Tal llegó a ser la desorientación y el revuelo, que se puso sobre aviso a los consumidores, y se aunaron los esfuerzos para dar a conocer la normativa que se había aprobado por la Ley Cañete, (con entrada en vigor en 2014), a través de la cual, el cerdo ibérico y su porcentaje de pureza debe ir certificado por norma. En el etiquetado deben reflejar su porcentaje de raza ibérica: 100%, 75% y 50%, y además como distintivo se establecía la introducción de una serie de precintos de colores (negro, rojo, verde y blanco) que indicaban si la pieza se trata de un 100% ibérico o un ibérico cruzado y el sistema de alimentación que ha llevado el gorrino (de bellota, de cebo de campo, de cebo). 

Es decir, cuando compras un jamón, siempre, siempre, siempre, debes fijarte en la certificación de procedencia, y como no, en el etiquetado.  

Pero, además, podrás diferenciar los diferentes jamones por sus características morfológicas, siguiendo estos consejos: 

  • Un Jamón 100% ibérico de bellota, normalmente tendrá la caña estrecha y alargada. Y su cuerpo será fino y brillante (debido a la grasa natural).  
  • Un Jamón ibérico de bellota cruzado al 50% o 75% tendrá la caña más basta, y un cuerpo más tosco. En el interior, su carne será de color rojo-rosáceo, cuánto más rosáceo menos puro será el animal.
  • Un Jamón de cebo de campo o de cebo ibérico será más voluminoso que los anteriores, y carecerá de esa untuosidad y ese brillo natural. 

Y si aún te quedan dudas, algo que no falla es el precio justo. La cantidad orientativa en la que está fijado el precio de un jamón ibérico certificado es de más o menos 25 euros/100 gramos si es precinto negro; 15 euros/100 gramos si es precinto rojo; 12 euros/100 gramos si es precinto verde; y 8,50 euros/100 gramos si es precinto blanco.

Como siempre, esperamos haber sido de ayuda. 

¡Hasta pronto!